Siento decirte que esto te va a pasar alguna vez. Por eso, en base a mi experiencia, quiero contarte cómo identificar a un cliente que no paga. Son los típicos clientes que tienen ‘mucha cara’ y que se creen que tu trabajo no vale nada. O lo que es peor, se creen que te hace un favor «por pagarte». Es lo peor que te puede pasar en esta profesión, por eso te recomiendo que huyas siempre de ellos y ante a la más mínima sospecha, mejor no hacerle el trabajo.

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Cómo reconocer a un cliente que no paga

En el artículo acerca de los tipos de clientes que me he encontrado como redactora freelance ya te hablé un poco de este tipo de cliente. Sin embargo, hoy quiero darle una vuelta de tuerca y contarte todas las maneras que hay de identificar a un cliente que no paga.

Te pide siempre una rebaja

Es el típico cliente que no valora el trabajo que haces, porque todo lo que le digas le parecerá «mucho», ya que quiere un servicio de calidad pagando lo mínimo posible (¡viva el trabajo precario en España!). Así que desconfía de los clientes que no acepten tu precio y directamente te pidan una rebaja, algo falla. Además, a mí me pasa que cuando un cliente me lo hace pierdo las ganas de trabajar con él (ya que me desmotiva completamente).

Te envía los datos de facturación incompletos o se anda con rodeos

Normalmente, antes de empezar a trabajar siempre pido los datos de facturación (nombre completo, DNI, dirección, etc.). Si ves que un cliente tiene problemas para darte estos datos, mucho cuidado, es posible que no quiera pagarte y por eso le da tantas vueltas a todo. Por lo que es una buena manera de identificar a un cliente que no paga.

Te pide una prueba de trabajo gratis

Este tipo de cliente suele tener tanta ‘cara’ que incluso te puede llegar a pedir una prueba de trabajo gratis, ya que dice: «necesito saber cómo trabajas antes de contratarte«. Cuando le envías el portfolio y le explicas amablemente que se la tienes que cobrar porque «es tiempo de trabajo» se indigna y dice que no le parece normal, que no eres profesional y/o que se va a contratar a otro si no aceptas, etc. [Sí, aún por encima te hablará borde].

Te pide más de lo que paga

Una vez un cliente me contrató 5 artículos para su web. Pero lo que pasó después no te lo puedes imaginar…

Le hice los artículos y se los dejé como «borrador». Luego le envié la factura y me dijo «los artículos no salen en la web, corrígeme eso y luego te pago«. Le contesté amablemente que para eso tenía que crear un blog, ya que en su web no existía el apartado blog y que por tanto los escribí como «Entrada» pero se los dejé en borradores. A lo que me contestó…  «vale pues crea eso del blog y luego ya te pago». ¡¡Me quedé a cuadros!! Le estaba escribiendo que eso no iba incluido en el precio de la redacción de artículos, que se lo tenía que cobrar a mayores, etc, etc. Pero sinceramente, me daba ‘miedo’ que no me pagara, ya que básicamente me dijo «o lo haces o no te pago«. Así que finalmente se lo hice. No volví a saber de él, pero al menos pagó. Eso sí, tengo claro que no volveré a trabajar con él, porque a saber que me pide de «extra» la próxima vez.

Problemas para entender lo que incluye y lo que no incluye cada tarifa

El cliente que no paga, que no le gusta pagar o que quiere pagar lo mínimo, siempre tendrá problemas para entender lo que incluye y lo que no cada tarifa.

Por ejemplo tengo una tarifa de 0,02 € /palabra para artículos (sin revisiones) y 0,03 € / palabra para artículos que incluye 1 revisión. Pues este tipo de cliente es el típico que contrata el de 0,02 y te pide cambios… ¡si es que lo sabía! Le dices amablemente que la tarifa que contrató es la más barata y que no incluye cambios (de ahí su precio) y te dice que es tu obligación corregirlo, ya que si no lo corriges no te lo voy a pagar (y se queda tan ancho).

Vamos, que quiere el servicio de la tarifa de 0,03 pagando 0,02 y aún por encima de hacerle el trabajo, me amenaza con no pagarme… ¡Lo que me faltaba! Menos mal que clientes de este tipo puede haber 2 o 3 (al año), porque si fueran todos así era mejor tirarse por un puente.

Te pide que le devuelvas el dinero

Esto solo me pasó una vez en 4 años de trabajo (¡y menos mal!). Me pasó el problema que te cuento en el punto anterior (un cliente que me contrató también un pack barato sin revisiones y quería cambios).

Me dijo que los artículos estaban llenos de mentiras (lo cuál es extraño porque siempre consulto fuentes fiables, con dominio de autoridad, buen Alexa, etc.). Y me exigía que los volviera a escribir pero sin mentiras. El problema es que accedí a hacerle cambios sin cobrarle nada (dado que su pack barato no incluía revisiones). Pero apareció un segundo problema:  no era capaz de decirme que era lo que estaba mal [porque no quería perder tiempo] y yo tampoco era capaz de saber lo que estaba mal, dado que las fuentes eran fiables y en teoría debería esta todo correcto…

Así que me pidió, muy por las malas, que le devolviera el dinero. Viendo los problemas que me iba a dar este cliente, sabía que aunque se los volviera a hacer me iba a decir lo mismo, por lo que le devolví el dinero. Y por si fuera poco, ni siquiera me dio las gracias o me pidió disculpas, todavía le quedaron fuerzas para insultarme (sí, y bastante fuerte). Ya te digo, nunca me había pasado algo así en mis 4 años de profesión.

Tarda en contestar en cuánto le envías la factura

El cliente que es pagador se sentiría mal si pasan los días y no tienes noticias de él. Mientras que los clientes que no pagan desaparecen y si te he visto no me acuerdo. Así que si tarda en contestarte me temo que no lo volverá a hacer más, que se ha quedado con tu trabajo y no te va a pagar. En mi experiencia te diré que esto más tipo de «particulares», aunque hay de todo

Así que ahora que ya sabes cómo identificar a un cliente que no paga, ten cuidado y espero que no te pase. Y si te ocurre intenta llevarlo de la mejor manera posible. No te pongas a su altura, ni le insultes… céntrate en cobrar ese trabajo y luego si no quieres no sigas trabajando para ese cliente, pero al menos que el tiempo invertido no sea del todo tirado.

Huye siempre de este tipo de clientes.

Y como siempre digo: allá cada uno con su conciencia 🙂

¿Te ha pasado algo similar con un cliente como redactor freelance? ¿Cómo sueles actuar en estos casos? La verdad es que es una de las situaciones más difíciles a las que te tendrás que enfrentar en la profesión.